Si quieres sorprender a tus invitados con un entrante diferente y original, te propongo estas patatas baby rellenas de pollo en salsa. No solo son diferentes a cualquier aperitivo o canapé, sino que están realmente ricas.
RECETA EN VÍDEO
PATATAS BABY RELLENAS DE POLLO
INGREDIENTES:
1 pechuga de pollo
INGREDIENTES:
1 pechuga de pollo
150 g de salsa de tomate, gaucha o barbacoa
300 ml de caldo de pollo
8-16 patatas baby
Aceite de oliva virgen extra
Pimienta negra
Sal
Para decorar:
Cebollino fresco
Utilidades:
Tabla de equivalencias
Dónde comprar mis utensilios
PREPARACIÓN:
Decoramos con un poco de cebollino fresco picado y listas para servir.
Utilidades:
Tabla de equivalencias
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PREPARACIÓN:
Cocemos las patatas baby en abundante agua hirviendo durante 20 minutos. Una vez listas, las sacamos y dejamos enfriar totalmente.
Para el relleno voy a utilizar una pechuga de pollo limpia de grasa. La pinchamos con un cuchillo por todos los lados y salpimentamos al gusto. Ponemos la pechuga en una olla y echamos salsa al gusto, yo voy a utilizar esta salsa gaucha, pero podéis ponerle salsa barbacoa o cualquier salsa de tomate. Pintamos una cara del pollo, le damos la vuelta, echamos otra buena cantidad de salsa y pintamos. Vertemos 300 ml de caldo de pollo o hasta que la pechuga quede casi cubierta. Tapamos y dejamos cocinar 15 minutos a fuego suave. A media cocción le damos la vuelta a la pechuga y seguimos cocinando.
Una vez frías las patatas las partimos por la mitad y las vaciamos con ayuda de una cuchara. El sobrante de patata lo reservamos para hacer un puré o cualquier otra elaboración. Las colocamos en una bandeja apta para el horno. Salpimentamos al gusto y echamos un chorrito de aceite de oliva. Gratinamos en el horno hasta que tengan un bonito color dorado.
Deshilachamos el pollo con ayuda de un par de tenedores y acabamos cortando con unas tijeras para hacer los trozos aún más pequeños. Volvemos a echar el pollo a la olla con el caldo y dejamos cocinar a fuego suave 10 minutos más.
Rellenamos generosamente cada una de las patatas. Os sobrará la mitad del relleno, así que podéis duplicar la cantidad de patatas o aprovechar para rellenar un sándwich o para comer con la patata cocida que hemos vaciado antes.
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